Con la cabeza gacha
La reserva tripera recibió a Estudiantes en Estancia Chica por el partido postergado de la fecha 12. El conjunto dirigido por Andrés Yllana no pudo con su par rival y perdió por la mínima.
Jugar un clásico siempre es especial, hasta en las divisiones inferiores, por eso es que la reserva del lobo quería ganarle al otro equipo de La Plata y el DT, junto con Mariano Messera, paró un equipo con varios jugadores que ya habían debutado en primera división, Bonnin y Bonifacio, entre otros, sin embargo, no lograron marcar diferencia.
La mañana en Estancia Chica comenzó con un primer tiempo en el que Gimnasia fue superior al rival, en el que el arquero Daniel Sappa, se transformó en figura. Fueron escasas las llegadas al arco de ambos equipos, sin embargo, las más claras las tuvo en el lobo. La primera, en los pies de Ezequiel Bonifacio que, a los 20´ tomó un rebote e hizo que el arquero rival se esfuerce para controlar.
Las combinaciones entre Nahuel Speck y Mariano Rivadeneira por el sector izquierdo hacían prender una luz de esperanza para la llegada del gol tripero, y así fue como a los 35´luego de una serie de pases entre ambos, el 11 cruzó la pelota y Leandro Tapia no llego a empujarla.
La última llegada clara para el conjunto de Yllana fue a los 40´, cuando Erick Ramírez, luego de un centro de Lautaro Pollero, tomó la pelota en el area, giro y remató al segundo palo pero, nuevamente el arquero rival reaccionó bien y no permitió el gol tripero.
El arquero de Gimnasia, Yair Bonnin fue llamado a intervenir al final del primer tiempo, cuando Nicolás Talpone entró con pelota dominada al area tripera. El golero, en su afán por cuidar la portería, cruzó al mediocampista, haciéndole penal, sin ser cobrado por el referí.
El primer tiempo dejó la sensación de que Gimnasia mereció irse ganando. La seguridad de Manuel Guanini y Gian Córdoba opacaron al delantero pincha. Las proyecciones de Nahuel Speck y Lautaro Pollero siempre preocuparon al DT rival. Agustín Bolivar se hizo dueño y señor del mediocampo, así como Mariano Rivadeneira de la pelota, pero sin dudas, el mejor estaba siendo Leandro Tapia Gil, categoría 97, uno de los goleadores del Lobo.
El segundo tiempo comenzó siendo una antítesis a lo hecho en el primero. Luciano Perdomo no se encontraba con Bolivar, a Erick Ramírez no le llegaba la pelota y Ezequiel Bonifacio daba señales de no estar bien físicamente.
A los 8´el otro equipo de La Plata abrió el marcador, luego de un remate Matías Ahumada, controlado por el 1 tripero pero con rebote largo y alto que capturo Quintana que, de chilena selló el primer gol del partido.
A partir de la apertura del marcador, el partido se picó. Las acciones bruscas y protestas hacia el árbitro se hicieron constantes. El lobo no encontraba el camino para empatar el marcador, y a pesar de los ingresos de Enzo Martínez, Daian García y Matías Miranda, quien jugó sus primeros minutos en la reserva, no pudo cambiar el rumbo del partido. El “chueco” Yllana fue expulsado debido a que protestó la acción en que Emiliano Ozuna proporciono una patada desleal hacia el 4 tripero y puso en riesgo el físico del jugador, y por consiguiente, se retiró antes a los vestuarios.
El lobo no tuvo eficacia, hizo que el arquero rival sea figura, y sigue sin poder ganar un clásico. Hace varios partidos que no lo logra en reserva, y se hace eco a lo que sucede en primera. El entrenador tripero deberá cambiar de página lo más rápido posible, marcar y trabajar los errores para seguir formando de la mejor manera a los juveniles triperos.
GIMNASIA: 1 – Bonnin, 4 - Pollero, 2 - Guanini, 6 - Córdoba, 3 – Speck; 7 – Bonifacio, 8 – Perdomo, 5 Bolivar, 11 – Rivadenaira; 10 – Ramírez y 9 - Tapia.
Estudiantes: Sappa, Adin, Vargas, Belucci, Diaz; Talpone, Cascini, Massaccesi, Ozuna, Acuña y Quintana.